El actual Gobierno de México ha trabajado el combate a la inseguridad bajo el lema de “abrazos y no balazos”, algo que a decir del presidente Andrés Manuel López Obrador, continuará hasta el fin de su sexenio. Sin embargo, entre los resultados que la estrategia ha mostrado, uno de los sectores que ha padecido un incesante crecimiento de robo y vandalismo es el ferroviario.

Tan solo las zonas entre Veracruz-Ciudad de México, Veracruz-Puebla, ciertos lugares del bajío y de Zacatecas se han convertido en los focos rojos para las vías del tren, lo que ha provocado que la industria solicite apoyo a las Fuerzas Armadas, además de aplicar inversiones para el rubro de seguridad.

“Hay zonas en las que hemos tenido buena relación con la Guardia Nacional, con la Marina y con el Ejército. Sí hay zonas en las que hemos pedido ayuda por tramos dentro de la asociación en temas de carga”, afirma Oscar Del Cueto, presidente de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles (AMF).

No obstante, sostiene que ante otros medios de transporte el ferrocarril es muy seguro para mover mercancías, “a pesar de la situación en la que estamos”.

José Zozaya, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), confirma que sí han registrado alzas en los robos en el ferrocarril, sin embargo, no menciona un porcentaje debido a que “cada armadora tiene los suyos y esos se concentran por las empresas ferroviarias, no tengo esos datos, pero sí la queja de los aumentos”.

De igual manera, ratifica que los casos de robos también se han incrementado contra el sexenio pasado del expresidente Enrique Peña Nieto, “sí ha aumentado y también la violencia y eso es lo que más nos preocupa y nos ocupa”.

“El tema del crimen organizado ha estado subiendo de nivel y por eso han incrementado la violencia en los robos. Estamos en constante comunicación con las empresas ferroviarias, pero también se necesita que la autoridad resuelva los temas y no solo use inteligencia sino también use los medios digitales de supervisión y vigilancia, hay tantas fórmulas que debieran de hacerse y de utilizarse por las autoridades”, considera.