Apenas el pasado domingo 17 de agosto, cerca de las 21:00 horas, el testimonio de Édgar Sánchez manifestaba un tono de alerta, “tomen sus precauciones, acabo de pasar a cargar gasolina y de las ocho bombas sólo dos funcionaban, además, sólo me podían vender 20 litros porque no había gasolinas, ¡ah, y sólo efectivo!”.
A pesar del testimonio, Petróleos Mexicanos (Pemex) había publicado algunas horas antes: “Los incidentes registrados la semana pasada en Nuevo León, Chiapas y en el Valle de México, se debieron a ajustes en los mantenimientos, mismos que ya han sido atendidos al 100% y el abasto ha sido regularizado en su totalidad”, situación que al menos en el oriente de Ciudad de México no coincidía con la realidad.
“Los problemas que se están enfrentando, son por una falta de logística por parte de Pemex, porque los proveedores de transporte tenemos las configuraciones PR (tipo de permiso) para poder abastecer directamente de las terminales de almacenamiento a las estaciones de servicio”, comentó a T21 un transportista especializado en hidrocarburos, y que pidió no ser identificado.
Al respecto del desabasto, otro transportista consultado por T21 describió que, con base en información que se tiene dentro del sector, de las más de dos mil pipas que en 2019 el gobierno federal adquirió, es de conocimiento público que algunas fueron recuperadas por las empresas financieras ante una situación de incumplimiento de pagos, versión que fue confirmada por otro transportista.
“El tema es que no terminan de entender la forma en que se puede hacer la logística, y que no sólo se trata de operar las pipas de Pemex que están bajo resguardo de la Secretaría de la Defensa, sino de aprovechar la infraestructura de transportistas que operan con Pemex y que se tiene la capacidad”, describió uno de los empresarios.
Apenas en julio pasado, cerca de 150 empresas transportistas al servicio de Pemex renovaron un contrato de prestación de servicios, con lo cual seguirán operando por seis años los servicios para la empresa pública del Estado, mismas que con su infraestructura podrían atender las zonas con escasez.